En los sistemas eléctricos de alta tensión, la seguridad comienza desde el suelo.
La puesta a tierra es uno de los componentes más importantes y, a la vez, más ignorados en muchos proyectos eléctricos. Su correcta instalación no solo protege los equipos, sino también la vida de las personas que operan cerca de ellos.
¿Qué es una puesta a tierra?
La puesta a tierra es un sistema que conecta eléctricamente los equipos, estructuras o redes eléctricas con el terreno. Su función principal es desviar las corrientes de falla o descargas eléctricas hacia la tierra, evitando accidentes, daños o sobrecargas.
En los sistemas eléctricos de alta tensión, esta conexión se realiza mediante terminales de puesta a tierra, cables y electrodos que garantizan una conducción eficiente y segura de la corriente.
¿Por qué es tan importante en alta tensión?
En una red de transmisión eléctrica, las tensiones son muy elevadas.
Sin una buena puesta a tierra, un rayo o una falla eléctrica podría causar daños graves en los equipos, incendios o incluso poner en riesgo la vida de los técnicos.
Por eso, las torres de alta tensión, subestaciones y estructuras eléctricas deben contar con sistemas de puesta a tierra diseñados bajo normas internacionales como ASTM, IEEE e IEC, que aseguran una resistencia óptima del terreno y una descarga efectiva de corriente.
Componentes y materiales
Los terminales de puesta a tierra pueden ser de cobre, acero cobreado o aleaciones especiales que resisten la corrosión y mantienen su conductividad por años.
Además, deben instalarse con uniones firmes y protegidas contra la humedad, especialmente en zonas con suelos salinos o alta humedad como la selva peruana.
Un diseño profesional considera:
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El tipo de terreno (arenoso, arcilloso o rocoso).
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La resistividad del suelo.
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La magnitud de corriente a disipar.
Una puesta a tierra eficiente garantiza la continuidad del servicio eléctrico, reduce fallas en los equipos y protege la vida humana.
En Electrocom Ingenieros, aplicamos ingeniería eléctrica certificada para asegurar que cada proyecto —desde torres de alta tensión hasta subestaciones— cuente con una base sólida, segura y confiable.
